“En 2008 habíamos vivido una situación similar, pero esta la superó. Fue la peor tormenta de estos diez años y, lamentablemente, no creo que sea la última con estas consecuencias”, señaló Agustín Fernández, intendente de Aguilares. “Si no hacen obras hidráulicas -como diques- no creo que podamos contrarrestar el desastre: hoy tenemos cinco barrios afectados por el desborde del arroyo Barrientos y la colmatación de los ríos, y las pérdidas de la gente son casi totales”, reflexionó.
Improvisación y desidia
El diputado nacional y candidato a gobernador, José Cano (Acuerdo Cívico) dijo que la situación por las inundaciones es crítica en el sur de la provincia y responsabilizó al Gobierno por la falta de obras para evitar tal desastre. “Estamos igual o peor que hace una década. El PE administró más de $ 200 millones en el plan Pre Lluvia y cifras millonarias en el Plan Más Cerca, pero se fueron por las alcantarillas de la corrupción”, criticó.
Similar fue la opinión del legislador Federico Romano Norri (UCR), que solicitó informes al titular de Obras Públicas, Oscar Mirkin. “Hay improvisación y desidia. El Gobierno no aprovechó los años de sequía para hacer obras que prevengan el avance de la aguas. Hoy eso se está pagando caro en el interior”, enfatizó.